VERANO 2020. AGOSTO
Lágrimas en el mar
Nunca había llorado en el mar.
La sal del agua envuelve y me
embalsama mientras, mis ojos,
desde el mar del alma,
riega mis mejillas hasta
la comisura de los labios.
La pena me hunde, aún haciendo pie.
Y vienen oleadas de llanto silencioso.
Totalmente solo.
Abrazado por el mar,
como si fuera un velo de tul
que me vistiera con delicadeza,
como mi madre, tantos años, ausente...
y que viniera del recuerdo de la infancia.
Nunca había llorado en el mar.
Solo y desconsolado.
Mirando hacia el horizonte,
bajo un Sol potente,
de mediodía,
en el centro mismo de un circulo…
casi infinito.
© GatoFénix
PD: Cuando han pasado quince meses, y he podido escribirlo, desde la paz interior.